Hay un juego ilegal que está “desangrando” silenciosamente a muchos ciudadanos.

Se denomina Keno. Apareció en muchas esquinas de poblaciones pequeñas fronterizas, proyectado en pantallas de televisores gobernadas por un computador que emite números aleatorios que van apareciendo en los monitores a los que apuestan ciudadanos, sin saber muchas veces que con sus recursos están “engordando” a peligrosas estructuras criminales .

Es como una ruleta digital que favorece a quien apostó por un serial de números que paga, cuando no se queda con el premio, generalmente en el mismo lugar de la apuesta.

Todo tiene aspecto de legalidad, el aviso, el mueble metálico sobre el que reposan el televisor y el computador, la línea telefónica que alimenta el juego e incluso la persona que lo opera que está uniformada, lo único que no está bien en el montaje es que no tienen reconocimiento legal por parte de Coljuegos y eso lo convierte en un delito que puede dar cárcel para quien administra el juego.

El mueble sobre el que descansa el monitor se puede ocultar entre dos personas y es por ello que cuando se hacen operativos por parte de la policía fiscal y aduanera muchos operadores desaparecen como por arte de magia llevándose con ellos incluso el premio de los apostadores .

El abogado Jhony Mena a quien en el campo de las apuestas legales conocen como el “Doctor Batalla” ha dedicado los últimos 15 años de su vida profesional a ilustrar a muchos jueces de la República sobre la legislación actual de juegos, explica “Batalla” que algunos miembros de la rama judicial desconocen que este comportamiento es un delito y por ello no se aplican penas por esta su ofrecimiento que atenta contra las rentas de los departamentos que están destinadas a las redes hospitalarias .

El juego ilegal parece en ocasiones una pandemia, llegó del lejano oriente hace cerca de cinco años y se expandió por varios municipios del norte del país sin que contra el actuaran en su momento las autoridades.

Los promotores de este y otros juegos  ilegales son lavadores de dinero que mueven a través de los premios volúmenes impresionantes de efectivo, el Doctor Batalla calcula que se defraudaron el año pasado cerca de tres billones de pesos aunque el presidente de Asojuegos, el gremio de las casas de apuestas legales, Juan Carlos Restrepo sostiene que la cifra puede acercarse a los cinco billones .

Estos juegos no aportan impuestos al sistema de salud dejando un agujero evidente en las finanzas de los departamentos donde se ha detectado esta modalidad de juego.

El año pasado fueron capturadas 512 personas que fueron judicializadas y la mayoría de ellas condenadas por atentar contra el patrimonio rentistico.

Se decomisaron más de mil computadores con sus monitores y las impresoras que fueron destruidos por la Policía  Nacional, cada equipo puede llegar a costar 10 millones de pesos.

Los departamentos donde se ha detectado con mayor fuerza el Keno son Cesar, Atlántico, Bolívar, Santander, Valle del Cauca y Nariño aunque la policía tiene certeza de que ya se extendió por todo el país.

Jhony Batalla acompañó esta semana una nueva jornada de destrucción de equipos para jugar Keno en Barranquilla, esta vez fueron 120 computadores, 97 televisores, 76 impresoras para el sello de las apuestas y 86 módems para conexión de los equipos, estos elementos fueron aprehendidos solamente en la capital de Atlántico donde se ha popularizado peligrosamente la práctica del Keno.